Todo el proceso contable es bastante complejo, sobre todo en ciertos momentos del ejercicio. Una de esas situaciones más delicadas ocurren cuando finaliza.
Saber cómo contabilizar reservas es uno de los puntos fundamentales dentro de la distribución de beneficios de la compañía.
Qué son las reservas
Las reservas son cuentas que tienen saldo acreedor y que se crean para hacer frente a posibles eventualidades que puedan surgir a la empresa. Pueden ser por pérdidas futuras o por depreciación.
Las reservas de una empresa también pueden entenderse como beneficios retenidos. Son una parte de los beneficios que se reservan para tener una buena posición financiera.
Suelen utilizarse para comprar nuevos activos, para devolver deudas o para financiar ampliaciones, primas y reembolsos de dividendos.
Quizás con estas definiciones no te haya quedado claro si las reservas son activo o pasivo. Forman parte del patrimonio neto de la empresa, dentro del pasivo de la misma.
Tipos de reservas
Aunque todas las reservas se encuentran dentro del patrimonio neto, existen diferentes tipos:
- Reserva legal. Es un tipo de reserva que está fijada por la Ley, en concreto por el artículo 274 del Real Decreto Legislativo 1/2010, de 2 de Julio, texto refundido de la Ley de Sociedades de Capital. Tiene que consistir en un mínimo del 20% del capital social. En caso de que no se alcance, habrá que destinar el 10% de los beneficios de cada ejercicio económico hasta que se alcance. Esta cifra puede variar, siempre que se parta de ese mínimo. Por ejemplo, si una empresa ha obtenido en un ejercicio unos beneficios de 65.000 euros una vez liquidados los impuestos y no tiene la reserva legal cubierta, deberá aportar a ella 6.500 euros.
- Reserva voluntaria. Va con cargo a los beneficios de la empresa y se aportará lo que el empresario o grupo gestor quieran. Habitualmente, tras cumplir con la cuantía que corresponde a la reserva legal, las empresas destinan sus beneficios a reservas voluntarias.
- Reservas especiales. En algunos casos también son obligatorias:
- Reserva por capital amortizado. Se hace cuando se reduce el capital para devolver las aportaciones a los socios.
- Reservas estatutarias. Son las que están reguladas en los estatutos de la compañía y por el acuerdo de los socios en ese documento. Los accionistas detallan qué porcentaje se destina a este tipo de reservas.
- Reservas por fondo de comercio. Siempre que haya activo en el fondo de comercio podrá existir este tipo de reserva.
- Reservas por acciones. Se genera por la compra de acciones de una sociedad dominante sobre otra.
- Reservas por pérdidas y ganancias actuariales. Sirven para cubrir las retribuciones del personal de carácter definido.
- Reservas ocultas. Se conocen también como internas, latentes o tácitas. Cuando existe intencionalidad son llamadas ocultas, pero cuando se generan de forma no intencionada son tácitas. No aparecen visibles en el balance de situación, pero influyen en él.
Entre todos estos tipos de reservas encontramos reservas disponibles e indisponibles. Por ejemplo, las reservas por acciones son indisponibles y las reservas por capital amortizado son disponibles.
Cómo contabilizar reservas en la distribución de beneficios
Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de contabilizar las reservas en la distribución de beneficios son las obligaciones que se establecen en la Ley y en los estatutos de la sociedad.
Teniendo en cuenta esto, hay que saber que antes de distribuir los beneficios hay que comprobar los siguientes límites:
- Dotar Reserva Legal. Como hemos visto antes, se establece en el artículo 274 del TRLSC que en todo caso, habrá de destinarse una cifra igual al diez por ciento del beneficio del ejercicio a la reserva legal hasta que alcance, al menos, el veinte por ciento del capital social.
- Patrimonio Neto igual o mayor que el Capital Social. Puede darse el caso de que una sociedad antes de la propuesta de distribución no cumpla con esto y como consecuencia del reparto propuesto sí lo cumpla.
- Reservas Disponibles iguales o mayores que gastos de Investigación y Desarrollo.
- Dotar Reserva Indisponible equivalente al Fondo de Comercio.
Si se cumplen todos los requisitos y todo está de acuerdo a lo establecido por la legislación mercantil, especialmente dotar la reserva legal hasta que ésta alcance el 20% del capital, será a la Junta General a la que corresponderá la decisión o no de compensar los resultados negativos de ejercicios anteriores. Sin embargo, si las pérdidas de ejercicios anteriores hacen que el valor del patrimonio neto de la sociedad sea inferior a la cifra de capital social, será obligatorio destinar el beneficio a la compensación de esas pérdidas.
La utilización de lo que haya sobrado tras la aplicación de todo lo anterior dependerá de la decisión de la Junta General. Lo más normal es destinarlo a dividendos para socios y accionistas o a la creación de reservas voluntarias, que pueden distribuirse más adelante en forma de dividendos o utilizarse para inversiones.
Ejemplo de contabilizar reservas
Para verlo todo más claro, voy a ponerte un ejemplo:
Imaginemos que una empresa obtiene una ganancia neta de 20 millones de euros durante el año fiscal. En una junta general ordinaria, los accionistas acuerdan distribuir el resultado de la siguiente forma:
- Dotar a la reserva legal según lo establecido por el TRLSC, teniendo en cuenta que todavía no se ha alcanzado el límite máximo de dotación establecido por dicha ley.
- Compensar los resultados negativos de periodos anteriores. El importe total es de 2 millones de euros.
- Se destinará un 20 por ciento a una reserva indisponible que se establece en los estatutos de la empresa con el fin de incrementar el capital de la misma. Se incluirá en la cuenta contable de otras reservas, concretamente las estatutarias.
- Distribuir un dividendo del 12 por ciento de los 10 millones de euros de capital social a los accionistas.
- El restante, si hubiera, será empleado para establecer reservas voluntarias.Por tanto, se incluirá en la cuenta contable de reservas voluntarias.
El asiento contable quedaría de la siguiente forma:
20.000.000 (129) Resultado del ejercicio
a
Reserva legal (112) 2.000.000
Reservas estatutarias (114) 4.000.000
Dividendo activo a pagar (526) 1.200.000
Resultados negativos de ejercicios anteriores (121) 2.000.000
Reservas voluntarias (113) 10.800.000
Ahora ya sabes cómo contabilizar reservas en la distribución de beneficios. Aunque puede parecer complejo, si sigues los pasos correctamente no tendrás problemas.
Sin embargo, el reparto de beneficios y la contabilización de reservas es un aspecto sobre el que te recomiendo que cuentes con el software y el personal especializado para que todo quede perfecto. Aon Solutions puede ser la solución a tus problemas, ya seas una empresa o una gestoría 😁