¿Tienes una gestoría y quieres vender seguros? La cuestión está siempre en ofrecer una solución lo más completa posible a tu cliente. Ahorrar molestias y convertirte en la solución a las necesidades de la persona que acude tu negocio, en el número más amplio y gestionable de aspecto relacionados con la gestión administrativa y con la naturaleza de tu negocio.
Pero, ¿qué necesito para incorporar la venta de seguros a mi despacho profesional? El proceso se inicia desde con el trámite de tu licencia o permiso general, pasando por el desarrollo de un perfil de corredor a través de las diversas técnicas de venta personal y marketing para captar y fidelizar a tus clientes.
Obtener tu licencia como agente de seguros
Partiendo de la premisa de que ya cuentas con tu despacho (asesoría, gestoría o similares), y estés constituido como profesional autónomo o como sociedad, condición sine qua non para desarrollar cualquier tipo de actividad económica; el segundo requisito fundamental para ser corredor de seguros es hacerte con el título de Mediador de seguros Grupo A, en la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP).
Para ello, te enfrentarás a un curso con 500 horas lectivas y se ofrece en los Colegios de Mediadores de Seguros a nivel provincial o en las facultades correspondientes dentro de Universidades públicas y provadas.
Es bastante común que las personas que acceden a este tipo de formación decidan desarrollar su carrera profesional como corredor de seguros de forma independiente. Además, muchos de estos profesionales vienen de otras áreas y, tal como mencionamos al principio del artículo, las compaginan con trabajos relacionados con la gestoría y asesoría, servicios administrativos o judiciales, entre otros.
Consejos para implementar estas nuevas líneas de negocio en tu despacho
Como cuando inicias cualquier actividad nueva como emprendedor, para vender seguros en tu asesoría como corredor es bastante recomendable contar con un colchón económico que te permita cierto margen de maniobra, aproximadamente, de unos 3.000 euros, siempre que te dediques a la correduría de seguros “estándar” y no a servicios con riesgo o con un valor económico elevado.
Además, la inversión en tecnología es clave para la eficiencia en los procesos, con el fin de rebañar bien el beneficio generado con la actividad. Si no, ¿qué sentido tendría aventurarte a abrir una nueva línea de negocio, sin poner toda la carne en el asador necesaria para que sea rentable?
Los expertos apuestas por la formación constante, el apoyo en la tecnología y en la búsqueda de sinergias. Un corredor de seguros está obligado a conocer el contexto y estar siempre al día conforme a las propuestas de la competencia, a la normativa que regula la actividad y los servicios prestados.
Por otro lado, apoyarse en las soluciones tecnológicas específicas para arrojar resultados eficientes, analizar datos y planificar su estrategia empresarial. Contar con el apoyo de colaboradores o una red de contactos en el que podáis retroalimentaros con las últimas novedades del sector e, incluso, ofrecerte nuevas líneas de negocio compatibles con la correduría de seguros. Si te interesa este ámbito, consulta las oportunidades disponibles como agente intermediario en la oferta de servicios como la formación programada y otros servicios administrativos que te permitirán ganar ingresos extra con tu despacho.
Acciones comerciales y marketing para vender seguros en tu asesoría
Empieza a investigar y a empaparte bien de las últimas tendencias en fuerza de ventas y trabaja bien tu argumentario para la atención de clientes vía telefónica.
Al margen de esto, como los clientes no te van a conocer por arte de magia (aunque puedes trabajar el boca a boca y otras acciones concretas) es recomendable la creación de un sitio web en donde describas los servicios ofertados y en el que puedan contactar contigo.
El mundo web siempre ofrece un sinfín de oportunidades y visibilidad. No es sencillo todo eso del posicionamiento en los buscadores, el uso de campañas de SEM o de plataformas y redes sociales para dar a conocer tu negocio.
¡Muchas gracias, Nahia!