Si hay un aspecto difícil para las empresas y los autónomos es la contabilidad de las amortizaciones. Gestron puede ayudarte con este tema, como siempre.
Para que lo tengas claro, voy a enseñarte qué son las amortizaciones y cómo se contabilizan. Y como mejor se puede ver este tema es con ejemplos reales.
Qué son las amortizaciones
La amortización hace referencia a la distribución de un gasto en un período de tiempo determinado.
Existe la amortización de activos y la amortización de pasivos. Son muy diferentes así que voy a explicarte la diferencia entre ambos.
Amortización de activos y amortización de pasivos
Las diferencias entre la amortización de activos y la amortización de pasivos son notables, ya que son términos prácticamente opuestos. ¡No los confundas nunca!
Tienen en común que ambos son un valor que tienen una duración de varios ejercicios y, también, para los que hay que calcular una amortización para repartirlo en los diferentes períodos.
La principal diferencia es que para un activo la amortización significa la disminución de su valor por el paso del tiempo y el uso y para un pasivo es la reducción de la deuda.
La contabilidad de las amortizaciones tiene ciertas complicaciones y variaciones, tanto para la contabilización de las amortizaciones de activos como para las de pasivos. Pero Gestron es el superhéroe que te ayudará con ellas.
Cómo contabilizar las amortizaciones de activos
Los activos son adquiridos por las empresas para utilizarlos en su actividad. Existe diferente tipo de inmovilizado: material, como una máquina o un ordenador, o inmaterial, como las licencias de los programas informáticos y las patentes.
Los bienes, que se compran a un precio determinado, con el paso del tiempo, el uso, la obsolescencia y la aparición de nuevos bienes mejorados, pierden parte de su valor.
La amortización de activos se hace para dejar constancia en la contabilidad de la empresa de la pérdida de valor que experimentan dichos bienes durante su vida útil. Así, esta depreciación se registra de forma progresiva en todos los ejercicios y no solo al final de la vida del activo de que se trate.
Para contabilizar las amortizaciones de activos se utiliza en el debe la cuenta de gastos de amortización del inmovilizado material o inmaterial, según corresponda, y la cuenta de amortización acumulada en el haber.
Este registro contable se hace anualmente para las sociedades y trimestralmente para los autónomos. De esta forma, se refleja en la contabilidad la depreciación de los activos de la empresa.
Para calcular la amortización de un activo hay que tener en cuenta varios elementos:
- Valor de compra por el que se adquirió el bien.
- Vida útil. Es el tiempo en el que el bien va a ser útil para la empresa, es decir el tiempo estimado durante el cual se espera utilizar el activo en la empresa. Este tiene un período máximo que está establecido por ley y puede consultarse en el sitio web de la Agencia Tributaria.
- Valor residual. Es el valor que tendrá el activo cuando finalice su vida útil, siendo el precio que tendría si se vendiera.
Con ellos se calcula el importe a amortizar anualmente según los diferentes métodos que existen.
Cómo calcular las amortizaciones de activos
Existen varias formas para calcular la cuantía que hay que registrar en la contabilidad de una empresa la amortización de sus activos. La amortización lineal y la decreciente son las más utilizadas.
Amortización lineal
El método de amortización lineal para el cálculo de cuotas de amortización de activos consiste en aplicar la misma cuota de amortización anualmente.
Existen dos formas de hacerla:
- Porcentaje. Se asigna un coeficiente anual a cada tipo de inmovilizado, que se multiplica por el valor de adquisición. Siendo la fórmula la siguiente:
Amortización anual = Valor adquisición x coeficiente
Los porcentajes pueden consultarse en la web de la Agencia Tributaria.
- Vida útil. Se hace dividiendo el valor de adquisición del activo por su vida útil, que también puede consultarse en la AEAT.
La fórmula a aplicar sería la siguiente:
Amortización anual = Valor de adquisición / vida útil
Amortización decreciente
Para contabilizar una amortización con este método se aplica cada año un porcentaje al valor pendiente de amortizar, que va disminuyendo cada ejercicio.
Existen unas tablas oficiales que indican los porcentajes a aplicar:
- 1,5% si el bien tiene un período de amortización inferior a 5 años.
- 2% si el bien tiene un período de amortización igual o superior a 5 años e inferior a 8 años.
- 2,5% si el bien tiene un período de amortización igual o superior a 8 años.
Ejemplos de amortización de activos
Para todos los ejemplos voy a utilizar el método lineal, puesto que es el más usado.
- Ordenador. Según las tablas de amortización vigentes se podrá amortizar un 25% anual o un máximo de 8 años para sociedades y un 26% anual y 10 años para autónomos . Así, en la compra de un ordenador de 1.000 euros, se incluirá un asiento de amortización por 250 euros al año para sociedades y 260 euros para autónomos.
- Mobiliario. Se podrá amortizar un 10% o un máximo de 20 años. Así, si se compra mobiliario por valor de 15.000 euros, la amortización anual será de 1.500 euros.
- Maquinaria. Las tablas de amortización establecen un máximo de un 12% lineal o 18 años. Por tanto, la amortización máxima aplicable será de 2.400 euros para una maquinaria valorada en 20.000 euros.
Cómo contabilizar las amortizaciones de pasivos
Para contabilizar las amortizaciones de préstamos en contabilidad se utiliza en el debe una cuenta de gastos para la parte de los intereses y la cuenta de la deuda para la parte de la devolución del capital.
Los sistemas más utilizados para el cálculo de la amortización de pasivo o amortización financiera son el sistema francés, el sistema alemán o el sistema americano.
Cómo calcular las amortizaciones de pasivos
Veamos los sistemas más utilizados para la amortización de pasivos.
Sistema francés
El sistema francés de amortización se hace a través del pago de cuotas fijas mensuales, incluyendo devolución del préstamo y los intereses generados.
Es la forma más habitual de devolución de préstamos hipotecarios, el sistema más utilizado en España.
Sistema alemán
A diferencia del sistema francés, el sistema alemán de amortización permite una devolución del mismo importe del capital mensualmente pero la parte de intereses va disminuyendo, por lo que la cuota total decrece cada mes.
Sistema americano
En el sistema americano se va pagando la parte de intereses periódicamente y el capital se amortiza en una única cuota cuando vence el préstamo.
Ejemplo de amortización de pasivos
Te voy a mostrar un ejemplo de cálculo y contabilización de amortización de un préstamo calculado con el método francés, ya que es el que se utiliza en España habitualmente.
Un préstamo de 20.000 euros a devolver en 10 años y con un tipo de interés fijo anual del 7% quedaría con una cuota fija mensual de 232,22 euros.
- Composición de la primera cuota:
- Capital que estamos devolviendo: 115,55 euros.
- Intereses: 116,67 euros.
- Composición de la cuota número 60:
- Capital que estamos devolviendo: 162,86 euros.
- Intereses: 69,36 euros.
- Composición de la cuota número 120:
- Capital que estamos devolviendo: 230,29 euros.
- Intereses: 1,34 euros.
Ahora ya te he explicado qué son las amortizaciones y cómo se contabilizan, ahora queda en tus manos hacerlo correctamente para evitar los problemas con Hacienda.
Ya sabes que si necesitas ayuda con este tema o con otros similares, puedes contar con nosotros. En Ayuda T Pymes te asesoramos en todo lo que necesites.