Entender las cuentas contables puede ser un lío si no tienes claro qué son, para qué sirven o cómo funcionan. Pero tranquilo, que para eso estoy yo. Con ejemplos y explicaciones claritas, te lo voy a dejar mascadito. ¡Gestron al rescate! 🦸🏼♀️
Qué son las cuentas contables
La contabilidad es una de las cosas más importantes en una empresa. Mediante la contabilidad se puede conocer la situación económica de una empresa, su salud financiera y tomar decisiones más acertadas tomando los datos reales.
Para la contabilidad se utilizan cuentas contables. Son diferentes partidas donde se incluye información clasificada y clara del estado de una empresa. Son útiles tanto para los accionistas como para empleados o inversores.
La definición de cuenta contable sería algo así como la forma de registrar los datos financieros de una empresa de forma cronológica y ordenada.
Clasificación de las cuentas contables
Hay distintas formas de clasificar las cuentas contables. Sin embargo, la principal es la siguiente:
- Activo. Está formado por los bienes y derechos que tiene una empresa en propiedad. A su vez, los activos pueden ser tangibles, como un inmueble, o intangibles, como un software. Además, los activos se suelen clasificar según la dificultad que existe para convertirlos en dinero:
- Corrientes. Son los que tienen más liquidez. Aquí se incluye el dinero de la cuenta bancaria, la mercancía lista para vender o un derecho de cobro.
- No corrientes. Se incluyen en esta tipología los que son más difíciles de convertir en dinero, por ejemplo los ordenadores o maquinaria de la empresa.
- Pasivo. Está formado por las deudas de la empresa, tanto a corto como a largo plazo. Aquí se incluyen las deudas con proveedores y también los préstamos bancarios. También se clasifican según el plazo de devolución:
- Corriente. El que se devuelve a corto plazo.
- No corriente. Se devuelve a largo plazo.
- Patrimonio neto. Está formado por el capital o los recursos que aportan los socios y por los beneficios que genera la actividad de la empresa.
- Ingresos. Es todo el dinero que recibe la empresa como consecuencia de su actividad.
- Gastos. Son los costes a los que tiene que hacer frente la empresa para poder realizar su actividad.
Sé que estás aquí por los ejemplos, así que vamos a terminar con la teoría para pasar a la práctica 😜
Ejemplos de cuentas contables
Aunque en el Plan General Contable hay muchísimas cuentas, existen algunas que por importancia y frecuencia de uso es importante conocer. Las más destacadas son:
- 100, Capital Social. Forma parte del patrimonio neto. En esta cuenta se registra el capital que se haya aportado a la empresa, ya sea en efectivo o en forma de activos.
- 572, Bancos. Forma parte del activo. Todos los negocios van a tener movimiento de dinero en sus cuentas bancarias, que se registran en esta cuenta. También se podrá consultar en esta partida la liquidez actual de la empresa.
- 400, Proveedores. Forma parte del pasivo. Se incluyen aquí las deudas que se tienen con los distintos proveedores donde se hacen las compras de mercaderías. En ella se pueden comprobar los saldos pendientes para saber qué importes debemos.
- 410, Acreedores. Forma parte del pasivo. Al igual que la cuenta de proveedores, en la de acreedores se recogen las cantidades que se tienen que pagar a las empresas que nos prestan servicios. También puede verse si tenemos facturas pendientes de uno o varios acreedores en esta cuenta.
- 430, Clientes. Forma parte del activo. En esta cuenta aparecen los totales que los clientes nos tienen que pagar. De la misma forma que las anteriores, nos ayuda a comprobar qué cantidades nos deben y qué cliente en concreto tiene pagos pendientes.
- 600, Compras y gastos. Son los importes que se destinan al aprovisionamiento de la empresa. Comprende también los trabajos que, formando parte del proceso de producción propia, se encarguen a otras empresas.
- 700, Ventas e ingresos. Transacciones, con salida o entrega de los bienes o servicios objeto de tráfico de la empresa a cambio de un precio. Es la base imponible de nuestras facturas.
Ejemplos de conciliación de cuentas contables
La conciliación de cuentas contables es un proceso financiero por el que se comparan los registros contables con la información proporcionada por fuentes externas, como bancos y proveedores.
Tiene como principal objetivo garantizar que los saldos coinciden y que los registros realizados en los libros contables de la empresa sean correctos. En caso contrario, se procederá a ajustar y rectificar los errores.
La más habitual es la conciliación bancaria. Éste es el proceso que garantiza la concordancia entre los registros financieros de la empresa y los proporcionados por la entidad bancaria.
Pongamos un ejemplo. Hemos comprado madera para fabricar las mesas que vendemos. La factura es de un importe de 1.000 euros más IVA. El total a pagar, por tanto, serán 1.210 euros por lo que debe haber un movimiento en el banco por ese importe total que se conciliará con la cuenta 600, por importe de 1.000 y la cuenta 472, por importe de 210.
Si hay alguna diferencia habrá que comprobar si el pago se ha hecho de forma incorrecta o si se ha registrado mal la factura contablemente.
Ejemplos de análisis de cuentas contables
Hacer un análisis en profundidad y detallado de las cuentas contables puede ser muy útil para obtener información sobre los tipos de deudas que se tienen, en qué plazo pagan los clientes, el importe de los gastos financieros y otros aspectos similares.
Esto es muy útil para solucionar algunos problemas de liquidez o de exceso de gastos, tomando decisiones en diferentes áreas de la empresa.
Ejemplos de cierre de cuentas contables
El cierre contable es el proceso por el que se hacen las revisiones y ajustes necesarios para conseguir una imagen de la situación económica de la empresa, calculando el rendimiento, las ganancias, las pérdidas y la valoración de los activos y pasivos.
Dentro de este proceso de cierre, se hacen varios asientos en los que se hace el cierre de cuentas contables.
- Asiento de regularización. Se utiliza para cerrar y saldar las cuentas de gastos e ingresos, trasladando el resultado a la cuenta de resultados del ejercicio.
- Asiento de cierre. Es el último asiento y con él se cancelan todas las cuentas con saldo. Tiene como finalidad poner las cuentas a cero, cargando las cuentas con saldo acreedor y abonando todas las que lo tengan deudor.
Veamos un ejemplo de estos asientos.
- Asiento de regularización:
2.000 (700) Ventas
A
Compras (600) 1.000
Pérdidas y Ganancias (129) 1.000
- Asiento de cierre:
2.000 (400) Proveedores
A
Bancos (572) 2.000
Espero que con estos ejemplos de cuentas contables y su funcionamiento para conciliar o cerrar te haya quedado más claro todo. Saber qué son las cuentas contables es fundamental para la contabilidad de tu empresa y para tu negocio.
Pero, como es un tema complejo, mi recomendación es que no te dejes engañar por lo fácil que pueda parecer. No lo hagas sin ayuda de profesionales o podrás tener grandes problemas. Y como nadie quiere enfrentarse a Hacienda, contacta con Ayuda T Pymes. Tendrás asesoramiento desde el primer día y tus cuentas contables se registrarán correctamente, dejando tu contabilidad lista para cualquier necesidad o consulta 😉