¿Vender sin comprar antes? ¡Pero qué invento es esto! (que diría la gran Sara Montiel). Pues resulta que esto es un invento llamado dropshipping. No me mires raro, que se trata de una forma de hacer comercio electrónico que está la mar de apañada. De verdad 👌
De hecho, cuando sepas lo que es el dropshipping, quizás te des cuenta de que has paseado por más de una tienda online de este tipo. No te extrañe, porque son muchos ya los emprendedores que se han sumado a esta tendencia que está arrasando en el mundo del ecommerce de algunos añitos para acá.
No te vas a quedar sin saber por qué, ¿a que no? Palabra de GesTron que esto del dropshipping es como un ratón ergonómico; parece extraño, pero en realidad conviene. Venga anda, que te cuento por qué.
¿Qué es el dropshipping?
La idea es muy sencilla. El dropshipping es un modelo de comercio electrónico en el que una tienda online vende sus productos sin comprarlos previamente.
Es decir, se trata de un ecommerce en el que no existe un stock físico, sino que ofrece un catálogo de artículos al cliente y, cuando este hace un pedido, es un mayorista el que lo prepara y lo envía. No en vano, dropshipping significa «envío directo».
¿Cómo funciona el dropshipping?
Puede que eso de no tener un almacén físico de productos te haya sonado raro, y lo del mayorista y demás. Pero en realidad, es muy fácil.
En el dropshipping, lo que se hace es llegar a un acuerdo con un mayorista, o una serie de mayoristas, para vender sus productos. Entonces, una vez que el cliente realiza una compra, la tienda online le pasa el pedido directamente a ese mayorista, quien lo prepara y hace el envío.
Cuando el cliente recibe su producto, es exactamente igual que si lo hubiera mandado el ecommerce, ya que el mayorista realiza el envío en nombre de la tienda online.
➡️ Un bonus por haber llegado hasta aquí: en este mundillo del dropshipping, al mayorista que suministra los artículos se le llama dropshipper.
¿Cuáles son los pasos para hacer Dropshipping?
Se hace camino al andar, como dirían Machado y Serrat. Así que vamos a ver los pasos para vender haciendo dropshipping:
1- Busca un nicho de negocio interesante
A la hora de elegir un nicho, tienes dos opciones:
- Ir a lo seguro y escoger uno que esté demostrado que funcione. Pero en este caso, la competitividad probablemente sea muy alta, por lo que para tener tu huequito te lo vas a tener que currar muy mucho.
- Apostar por un nicho más novedoso y arriesgado. En este caso hay un buen componente de incertidumbre, pero es como esas quinielas que se hacen a lo loco; si ganas, puedes ganar mucho más. Porque la competencia es menor y tienes ventaja para posicionarte.
2- Crea un ecommerce
Ya sabemos que para vender en el dropshipping no hace falta stock material, pero sí «lo mínimo que se despacha en botica», que diría mi madre: una tienda online a través de la cual ofrecer un catálogo de productos.
No hace falta ser informático, ni que lo sea tu cuñado, para crear un ecommerce. Resulta que hoy en día hay plataformas muy buenas, como Shopify, Prestashop, Magento o WooCommerce entre otras, que pueden ayudarte en esta labor.
3- Busca dropshippers con los que llegar a un acuerdo
Ya tienes tu tienda online, bien. Ahora es momento de empezar a ser un verdadero emprendedor. O lo que es lo mismo, de hacer negocios.
La cuestión empieza por buscar tus dropshippers. Y dirás que eso te suena a chino, ¿verdad? Pues algo de eso puede haber, porque muchos de los mayoristas con los que trabajan personas que tienen negocios de dropshipping son de adivina dónde.
Pues sí, tú. Plataformas como Aliexpress (a través de Alibaba) o DealExtreme son algunas de las favoritas en estos casos. Pero ojo, que también hay proveedores españoles muy buenos, como BigBuy, que trabaja en toda Europa.
4- Posiciona tu marca
Hasta aquí, todo correcto. Pero la que viene ahora, puede que sea la parte más complicada del asunto. Y es que resulta que esto del dropshipping está bastante bien, pero precisamente por eso, hay mucha gente ya metida en el mundillo.
Así que para poder vivir realmente del dropshipping, no te queda otra que trabajar muy bien el tema del posicionamiento para convertir tu negocio en una marca visible. Para ello, puedes trabajar estrategias de dos tipos:
- SEO (Search Engine Optimization). Estas estrategias trabajan el posicionamiento natural u orgánico en los motores de búsqueda. En este caso lo que se hace es llevar a cabo una serie de acciones para que cuando los usuarios buscan el tipo de producto que tú vendes, te encuentren precisamente a ti.
- SEM (Search Engine Marketing). Esto se refiere a otras estrategias que consisten básicamente en campañas de pago en los motores de búsqueda. Piensa en cuando haces una búsqueda en Google, y en los primeros resultados que te aparecen pone «Anuncio». Eso es el SEM, ni más ni menos.
– «GesTron, si al principio no voy a tener ni un duro, ¡cómo voy a pagar para anunciarme en Google!».
Ya, ya. No es necesario empezar por ahí. Puedes empezar trabajando el SEO y, más adelante, hacer campañas SEM.
Hay muchos recursos para aprender SEO gratis, aunque también puedes plantearte invertir parte de tu presupuesto inicial (aunque tengas poco) en contratar a un experto, porque los resultados pueden merecer mucho la pena.
El SEO y el SEM son fundamentales para posicionar tu tienda, pero hay otras estrategias que también pueden ayudarte para darle fuerza a tu marca, como el email marketing, el marketing en redes sociales, etc.
¿Cuáles son las ventajas del dropshipping?
El dropshipping ha seducido ya a muchos emprendedores, ya que sus ventajas son evidentes:
1- Ahorro de costes
Para empezar, se trata de un negocio online. Eso de por sí se traduce en ciertos ahorros con respecto a una tienda convencional, ya que no tienes que alquilar un local (ni pagar los suministros típicos, como la luz).
Hombre, te va a hacer falta una conexión a Internet, qué menos. Pero si ya tienes una red contratada en casa, es más que suficiente. Y si no, ya sabes lo que tienes que hacer.
2- Posibilidad de trabajar desde donde quieras
Tener una tienda online al uso te permite hacer parte del trabajo desde donde te parezca, pero hay una parte que tienes que hacer desde un lugar concreto, que es donde tienes tu almacén.
Pero como en el dropshipping no hay almacén que valga, aquí puedes trabajar todo el tiempo literalmente desde donde quieras. Te llevas el portátil a la playa en verano y a la casita que has alquilado en la sierra en invierno, y aquí paz y después gloria.
3- Más tiempo para hacer marketing digital
Esta no es de las primeras ventajas que quizás se te pueda venir a la mente al hablar del dropshipping, y sin embargo, es muy importante.
Como te he explicado ya, en el dropshipping, es el dropshipper (ya estamos con los trabalenguas) quien hace el envío al cliente en nombre de tu tienda online. Es decir, tú no tienes que encargarte de la logística para nada.
Así que ese tiempo que te ahorras, puedes emplearlo en lo que realmente tienes que hacer tú, que es posicionar tu negocio mediante estrategias de marketing digital. Y es que, como ya sabes, vas a tener que hacer SEO, invertir en SEM cuando puedas y dedicarte al marketing digital de tu negocio todo lo que puedas.
4- No te quedas con stock «colgado»
Normalmente, el vendedor compra productos que sabe que puede llegar a vender. Pero aquí no hay nada asegurado, y no está la cosa para derrochar.
Esa es una de las ventajas del dropshipping, que no tienes que comprar los productos antes de venderlos. Todo lo contrario; primero los vendes, y luego los compras. Más chulo que un ocho, tú.
¿Cuáles son las desventajas del dropshipping?
Yo no voy a comisión con ningún dropshipper y si lo fuera, uno es honrado. Así que tengo que reconocerte que no todo el monte es orégano, y que el dropshipping también tiene sus cosillas. Yo destacaría las siguientes:
1- Los márgenes, que no suelen ser gran cosa
Pues sí, los márgenes son la gran desventaja de hacer dropshipping, principalmente si eliges un nicho que ya esté «muy cogido». Hay muchas personas intentando vivir de este mundillo, por lo que es habitual encontrarse con muchos ecommerce de dropshipping con unos precios muy bajos.
Y a ver cómo vas tú y les haces la competencia subiendo los precios, ¿verdad? Eso es cierto. Así que no te queda más remedio que intentar posicionarte bien para vender mucho. O elegir un sector en el que haya menos competencia, que tampoco es fácil.
2- Dependes de la «formalidad» del dropshipper
Aunque tú seas súper serio en tu trabajo, hay un hándicap: el mayorista también tiene que serlo para que el comprador tenga la sensación de estar frente a un negocio que cumple.
Pero bueno, que a grandes problemas, grandes soluciones. Lo que tienes que hacer es informarte muy bien antes de elegir proveedor. Ahora con Internet, la información no solo es poder; la información es lo que sobra por todos lados.
3- Trabajar con varios proveedores en dropshipping tiene sus inconvenientes.
En el dropshipping, es muy habitual trabajar con más de un mayorista. La variedad nunca viene mal. Pero ojo, porque también tiene algunos puntos en contra.
Imagina que tu cliente te pide dos productos, y cada uno de ellos te lo vende un dropshipper distinto. Tienes que pagar dos envíos por un mismo pedido, y además, debes hacer saber al cliente que sus artículos le van a llegar por separado (cosa que igual no se espera).
Fiscalidad de los negocios de dropshipping
Si tienes un negocio de dropshipping, vas a tener que tributar por dos impuestos: el IRPF y el IVA.
Y para que te voy a engañar, en este tema el dropshipping tiene sus complejidades. Sobre todo cuando el distribuidor, vendedor y comprador, se encuentran en diferentes países.
¿Pero sabes qué? En este punto no me voy a detener más, porque en el siguiente enlace tienes un maravilloso post nuestro (modestia aparte) sobre cómo tributa el dropshipping.
Dropshipping y Amazon: una alianza exitosa
Y ahora, un cotilleo: ¿sabías que hay muchos emprendedores que hacen dropshipping con Amazon? Este caso es aún un poco más rebuscado, pero puede resultar rentable.
Son personas que tienen sus proveedores de productos, pero que en vez de venderlos a través de un ecommerce propio, lo hacen por Amazon.
Estas personas aprovechan la reputación que tiene Amazon para vender sus productos a través de este canal. Es decir, el ecommerce que ofrece los productos es el propio Amazon, y el emprendedor manda los productos que compra a otros proveedores y los envía en nombre de Amazon.
Si quieres saber cómo hacer dropshipping en Amazon, aquí tienes un resumen de los pasos que hay que dar:
- En primer lugar, tienes que acceder a la página para crear una cuenta de vendedor en Amazon.
- Una vez iniciado el proceso, deberás elegir un plan de ventas:
- El plan individual, por el que pagas una cantidad de 0,99 euros al mes más IVA por cada producto que vendas.
- O el plan profesional, en el que pagas 40 euros más IVA al mes con independencia de los productos que vendas al mes (por lo que conviene si piensas que puedes vender más de 40 productos al mes).
- También tendrás que decidir e indicar si quieres vender solo en España, o en todas las plataformas que tiene Amazon en Europa (aparte de la de España, las de Italia, Francia, Reino Unido y Alemania).
- Después deberás introducir toda la información que te pedirá la plataforma (del negocio y el vendedor, de pago, etc.).
- Y finalmente, podrás sincronizar tu cuenta de vendedor en Amazon con el catálogo de tu proveedor.
Como ya sabemos, vender en Amazon no es gratis (la marca se paga, my friend). Por un lado, tienes que pagar una cantidad fija según el plan que elijas.
Pero además, Amazon cobra una tarifa por referencia cada vez que se materializa una venta, que consiste en un porcentaje total de la operación según la categoría a la que pertenece el producto (por ejemplo, por las ventas de artículos de cocina Amazon se lleva un 15% adicional).
Bueno, pues yo creo que ya tienes información suficiente para saber si el dropshipping es lo que estás buscando para tu negocio, o si tú eres un clásico donde los haya y prefieres tener un almacencito y tenerlo todo más controlado.
Tampoco te precipites, criaturita; sopesa los pros y los contras del dropshipping. Medítalo, consúltalo con la almohada, háblalo con tu cuñado. Bueno, esto último mejor no, no vaya a ser un Doctor Liendre.
Pero hagas lo que hagas, cuando montes tu negocio online, acuérdate de este que te ha soltado más de 2.000 palabras, menuda guía, para contarte qué es el dropshipping.
Vamos, lo que te quiero decir es que cuando tengas tu tienda online, recuerdes que para la parte de la asesoría, aquí está AYUDA T PYMES.
Ya te he dicho que en esto del dropshipping, hay competencia. Así que concéntrate en lo tuyo como la niña de Stranger Things antes de sangrarle la nariz, y lo de los impuestos y demás déjanoslo a nosotros.
Muchas gracias por tan oportuna e importante información le tendré presente me interesa la idea de aquí a poco estare buscando para dar este paso de seguro estamos en proceso muchas saludos cordiales. 🤝🙌
A ti por seguir a Gestron. Escoge bien a tus proveedores de dropshipping cuando te pongas manos a la obra.